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| LA HABANA - CUBA |
Después de sufrir una pandemia a nivel mundial llevábamos tiempo buscando una oportunidad para viajar y hacer uno de esos viajes soñados. Teníamos Cuba, el año pasado, en el punto de mira pero se cerraron fronteras y no pudo ser. Ahora con la vacuna, ha sido posible.
Existen, básicamente, dos formas de viajar en moto alquilada por la isla cubana. Una en Harley Davidson, muy cara -por cierto- y con guía. La segunda es -por tu cuenta- alquilando un scooter.
Nosotros elegimos la opción de la Piaggio MP3 de 300 cc. Para los profanos, es un scooter triciclo. Lógicamente, con 3 ruedas y dos de esas ruedas situadas delante.
Vamos a situarnos un poco en este país ubicado en una isla caribeña. La República de Cuba tiene poco más de 12 millones de habitantes. Con respecto a España existe una diferencia horaria de 6 horas. Al ser un clima tropical, la temperatura suele ser agradable todo el año. Con temperatura constante que ronda entre los 24 y 30 grados de media. Tiene una estación húmeda de junio a octubre con frecuentes lluvias tropicales. También, pueden producirse huracanes, sobre todo en octubre y algo menos en noviembre. La temporada seca transcurre de noviembre a mayo. Por tanto, es la mejor época para viajar a Cuba.
Referente a la política, todo el mundo sabe que es -un estado socialista desde la Revolución Cubana en 1959- una “democracia popular”. Todavía, pervive la sombra del bloqueo de EEUU y otros países.
La moneda oficial es el CUP (peso cubano) y equivale a un dólar americano. Aunque existe otro tipo de moneda que es el CUC (peso cubano convertible). Hace pocos años han llegado a convivir hasta 4 tipos de moneda diferentes. El cambio de moneda hay que hacerlo en las CADECA,s (acrónimo de las casas de cambio), donde cambian a 0,29 (diciembre 2021) el Euro, al mismo tipo que en el aeropuerto. En el mercado negro se paga a 0,80, pero se debe hacer en sitios de confianza. Antes, los dólares llevaban un impuesto del 10% de gravamen, ya no. El Euro está muy bien considerado y es la divisa preferida por los cubanos. El pago con tarjetas, tanto de crédito como de débito, son complicados. Las tarjetas que pertenecen a bancos estadounidenses no son aceptadas. Hay pocos cajeros automáticos (ATM) que cobran altas comisiones y suele haber bastantes colas de gente esperando para sacar dinero, por lo que es mejor llevar efectivo desde España y cambiar allí.
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| La Habana |
En Cuba no existe el “roaming” telefónico, por tanto, si quieres disponer línea de teléfono, necesitas una tarjeta prepago con un número cubano comprada en ETECSA, la compañía nacional. Skype y las llamadas de WhatsApp no funcionaban en Cuba hasta hace dos años. Antes se debía descargar IMO, la aplicación que utilizaban los cubanos para hablar con gente en el extranjero. Aunque existe internet y Google Maps, no existe street view. Como en otros países, es muy recomendable utilizar Maps.Me para tener acceso a un mapa GPS y poder moverte por la isla sin problemas.
El transporte público ha subido mucho de precio, últimamente, y es algo complicado. Los taxis se deben negociar de antemano porque no tienen taxímetro. Y algo está claro como en otros muchos países, a los extranjeros les cobran bastante más que a los compatriotas. Los vehículos americanos anteriores a la Revolución Cubana de 1959 son conocidos como “Almendrones”. Algo casi imprescindible, darse una vuelta en uno de ellos. Tan solo son un poco más caros que los taxis normales. Cuba en si es un museo rodante. Al principio piensas que estos viejos coches americanos (los Chevrolet, Büick etc.) solo se ven en La Habana, pero no, se ven por todas partes de la isla. El cubano de cualquier lugar tiene uno heredado de sus abuelos, en mejor estado de conservación o no. El taxi, muchas veces puede ser compartido (cada uno paga su parte).
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| Floridita y Coco-Taxi |
En principio, es un país seguro pero no hay que descartar “descuideros” y amigos de lo ajeno. No exento de timos, pero no hay violencia.
Para salvaguardar el intestino no es recomendable beber agua del grifo y por tanto hay que comprar botellas de agua embotellada, de la casi única marca nacional existente.
En cuanto a los restaurantes, hay dos tipos: estatales y privados (paladares). En los últimos años han proliferado los paladares ya que se han facilitado un poco las cosas para fomentar la creación de pequeños nuevos negocios. Nos comentan que los restaurantes con muchos empleados y muy baratos, son los estatales. La plantilla cambia todos los días, con la finalidad de emplear a más gente.
Comida más típica cubana:
- Ropa Vieja: verduras con carne.
- El Congrí: frijoles colorados, carne de cerdo, chicharrones, tocino y arroz.
- Moros y Cristianos: frijoles negros estofados con arroz.
- Lechón: asado o frito.
- Yuca con mojo: yuca cocinada con una salsa a base de aceite, ajo, sal, pimienta y limón.
- Ajiaco: especie de ragut de tasajo y carne salada acompañada de verduras, maíz, plátanos verdes, patatas, etc.
- Langosta enchilada: plato típico para turistas.
- Tostones: trozos de plátano verde, aplastados y fritos.
- Tasajo a la cubana: carne seca y guisada con abundante salsa.
- Tamal en cazuela con mariscos: guiso de tamal y mariscos con salsa bastante condimentada.
Otro capítulo aparte es el ron. Las marcas Havana Club y Santiago de Cuba son los más conocidos, aunque existen muchos más (Legendario, Cubay, Varadero, etc.).
Los extranjeros para poder viajar, es necesario que obtengan previamente un visado, que cuesta 22€ y es válido por un mes. Se puede sacar a través del consulado cubano o de una empresa (con gastos adicionales pero más rápido y sencillo, además te lo envían a casa: Online Tours). También, hay que llevar un seguro de viaje privado, obligatorio.
Para viajar no hace falta tener puestas vacunas, ya que no son obligatorias, excepto la de COVID-19 y el certificado de vacunación correspondiente. Nos comentan los cubanos que han recibido entre 4 y 5 dosis de su vacuna. También, han recibido la vacuna rusa. Aunque hay dengue y chikungunya, dicen que es suficiente para salvarse de las picaduras con un repelente para mosquitos.
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| La Habana |
Salimos desde Madrid, a medio día, en vuelo directo con destino al aeropuerto internacional José Martí en La Habana. Han sido casi 10 horas y media de vuelo donde hemos sobrevolado el mar de los Sargazos. Su nombre fue dado por los marinos portugueses por la gran cantidad de algas. La característica principal de este mar tranquilo es que no baña las costas de ningún país.
Llegada a Cuba. Además de los trámites habituales de pasaporte, visado y demás, hay que sumar un certificado cubano de vacunación; o te lo descargas o rellenas un impreso y muestras, además, el certificado europeo. Después, medición de temperatura corporal con termómetro y pasas a recoger el equipaje, eso si lo consigues. Bastante caótico eso de las cintas de transporte. Todos los impacientes pasajeros quieren entrar con los carros portaequipajes hasta las entrañas del aeropuerto para coger sus pertenencias y la ingente cantidad de bultos que llevan a sus familiares, por la escasez de productos.
Recibimiento en el aeropuerto por representante de la empresa que nos alquila las motos. Otra vez estamos de suerte ya que facilita mucho el transporte hasta el centro de las ciudades o los hoteles. Después de un montón de horas de espera, vuelo y demás, evita buscar con el cansancio y el equipaje un medio que te lleve, al menos al centro de la ciudad. En la recepción del hotel, una pareja de médicos, hacen una nueva medición con el termómetro y se les muestra el certificado europeo de vacunación. Como el día ha sido muy largo, restamos las 6 horas de diferencia horaria, comidas en el avión y después de todos los trámites, ya son casi las 20:00 horas. Es de noche cerrada, así que no da tiempo a ver demasiado ni tan siquiera de los alrededores del hotel.
El hotel está en Miramar, un barrio residencial y de grandes complejos hoteleros casi de lujo que fueron en otro tiempo atrás. En la actualidad, se les nota impregnados del inexorable paso del tiempo y la falta de mantenimiento y actualización. Es de noche y tarde, por lo que una opción apetecible es tomar una cerveza en el hotel. Atención, primer atraco: 4 cervezas = 40 USD. En el bar y terrazas del hotel rondan las mujeres “encontradizas” para pedir medicamentos o cambiar dinero.
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| Mural de la Prehistoria - Viñales |
DIA 2 - Etapa 1: LA HABANA - VIÑALES
Amanece sobre las 6:45. Hay como una bruma o calima en el cielo pero la temperatura es buena, que es la tónica general durante todo el año.
La misma empresa nos viene a buscar al hotel y traslada para recoger los engendros de motos. Después de los trámites correspondientes nos comentan algunos aspectos sobre particularidades de la conducción en Cuba. Es curioso que la gente avisa por llevar la luz encendida de la moto. Aquí no hay costumbre durante el día, pero estas luces son automáticas. Otra recomendación, no conducir de noche. Las carreteras son malas y hay bastantes baches. Las autopistas y autovías no están mal, aunque te puedes encontrar con la sorpresa de algún socavón o agujero de gran tamaño en el momento más inesperado. Después de cargar el equipaje empezamos la aventura callejeando un poco por amplias avenidas por La Habana y salimos por la Avda 23. Después tomamos la A4 (autopista Este-Oeste), que es una autovía de 3 carriles. Ya fuera de la ciudad, a nuestro paso vemos varios lagos. A medida que pasan los kilómetros, el asfalto va empeorando. Según nos alejamos de la capital y pasamos por pueblos pequeños, la gente se queda extrañada al ver nuestros triciclos con dos ruedas delante como quien ve un OVNI.
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| Cabañas |
La carretera va empeorando ostensiblemente y el segundo tramo tardamos más de una hora para conseguir hacer 30 km por la carretera CD. Vamos atravesando pequeñas poblaciones. La segunda parada en Bahía Honda, para reorientar la ruta. Bahía Honda es bastante grande y posee el punto más elevado de la provincia de Artemisa, el pico Pan de Guajalbón. Bahía Honda tuvo, en su bahía homónima, una de las bases navales arrendadas a Estados Unidos, hasta que se trasladó a Guantánamo. En la actualidad, es uno de los pocos lugares de desguace de buques de América Latina.
El tiempo apremia, por lo que decidimos acortar el trayecto y vamos directos a Viñales. Obviamos el paso por San Juan de Sagua, junto al Parque Nacional La Güira. El siguiente tramo es de 85 km. En Ancón, cambio de carretera a la 241. Desde 1984 en Viñales se declaró por la UNESCO la 1ª Reserva de la Biosfera de Cuba con la Sierra del Rosario (Comunidad de las Terrazas y Soroa). Destaca el sistema montañoso de altura media con la cordillera de Guaniguanico y su Parque Nacional conocido como Valle de Viñales donde se puede disfrutar de la magnífica flora y fauna cubana. Las montañas de origen kárstico, son similares a Vietnam pero con palmeras. Se aprecia mucha vegetación, tipo selva.
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| Viñales |
Viñales, situado al oeste de la isla de Cuba, a unos 185 km. de la capital habanera, en la provincia Pinar del Río y la Sierra de los Órganos. La zona es propicia para integrarse en la naturaleza y relajarse, hacer escalada. Este humilde municipio de estilo colonial tiene unos 28.000 habitantes. La calle principal con casas de madera de tipo colonial, está declarada Monumento Nacional. Esta calle principal atraviesa la ciudad y es donde se concentra la actividad comercial con restaurantes, la siempre concurrida farmacia y un local algo chill out para tomar copas.
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| Viñales |
Recomendaciones: A poco más de 4 km está el Mural de la Prehistoria en el mogote Pita (entrada 120 cup), donde, previamente, hay que atravesar el pequeño valle de Dos Hermanas. En la misma carretera por la que hemos llegado antes a Viñales está la Cueva Palenque de los Cimarrones (120 cup), dedicada al paso de los esclavos fugados. Era una cueva para tomar algo y ver un espectáculo nocturno, tipo cabaret.
La Cueva del Indio, visitable en un recorrido en barco por el río subterráneo San Vicente. Horario de 09:00 a 16:00.
Si se dispone de tiempo, también hay más cosas para ver: Gran Caverna de Santo Tomás (46 km de extensión, la más grande Cuba), Sierra de los Infiernos, Casa del Lago, Río San Juan, Cafetal Buenavista, Cascada y Orquideario de Soroa, Mirador del Castillo de las Nubes o Mirador de los Jazmines. En la Casa del Veguero, una plantación de tabaco que se puede visitar y ver todo el proceso de producción de los puros habanos. Desde Viñales como campamento base al Cayo Jutías, de aguas turquesas, Cayo Levis o María la Gorda.
Durante el trayecto entre pueblos hemos visto muchos camiones transportando gente, a modo de autobús. Igual que muchos caballos, carros, pequeñas motos, bicicletas o gente caminando.
203 km
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| Playa Jibacoa |
DIA 3 - Etapa 2: VIÑALES - JIBACOA
La tarde anterior intentamos repostar pero la gasolinera de Viñales se quedó sin suministro. Disfrutamos del primer pequeño momento de pánico. No nos aseguraron con certeza que se solventaría pronto la falta de gasolina, aunque esperaban que llegase el camión cisterna por la noche. Por la mañana temprano, llenamos los depósitos sin problema. Salida para Jibacoa, hacia el sur por la carretera 241. El primer tramo de 30 km hasta Pinar del Río es muy divertido, lleno de curvas y buen asfalto. Después nos encontramos un trecho bastante malo, lleno de socavones. Pinar del Río tiene varias gasolineras, como alternativa al susto de la tarde anterior. Pinar del Río, bastante grande con más de 147.000 habitantes, es donde se concentra la mayor producción de tabaco de Cuba.
El resto de la etapa decidimos hacerlo por la autovía A4. Con algunos tramos de 4 carriles. Circulando por la autovía, que es gratuita, podemos encontrar caballos, carros, agujeros, gallinas comiendo los restos de un atropello o gente que atraviesa a pie la mediana. No dejamos de ver coches americanos anteriores a la revolución cubana del 59.
Otro repostaje poco antes de llegar a La Habana. Hay que evitar entrar en la capital por lo que tomamos la variante llamada primer anillo (especie de M-30) por el sur hasta la A1. Este tramo final han sido 230 km., casi del tirón.
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| Playa Jibacoa |
Jibacoa es una zona natural entre La Habana y Varadero. Posee una playa única, caracterizada por la cercanía de una barrera coralina y protegida por montañas.
Pero lo más conocido es Playa Jibacoa, un pueblo de pescadores en la provincia de Mayabeque a 60 km al este de La Habana. La zona convertida en un centro vacacional para los cubanos. Lo que queda de jornada es para descansar un poco, disfrutar del mar Caribe y de los placeres del hotel.
Cosas para ver: Valle Yumirí del Mar, Molino Central Camilo Cienfuegos o los Jardines Hershey.
252 km
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| Cienfuegos |
Después del desayuno y cargar las motos nos dirigimos por la carretera Circuito Norte o Vía Blanca, hasta el Puente Bacunayagua (une las provincias de Matanzas y Mayabeque). Este puente construido en 1959 es el más alto de Cuba. Continuamos hasta Matanzas y conseguir repostar, sin problema. San Carlos y San Severino de Matanzas -nombre completo- es una famosa ciudad, a unos 38 km de Playa Jibacoa. Con casi 165.000 habitantes fue fundada en 1693 y conocida como la “Atenas de Cuba”. El castillo de San Severino (más bien es una fortaleza) alberga el museo de la Ruta de los Esclavos. Salimos de Matanzas por la Carretera Central de Cuba, casi todo este tramo tiene el asfalto en muy buenas condiciones. Proseguimos hasta la localidad de Jovellanos y para después seguir por la carretera 202, equivalente a una carretera nacional. Hace bastante calor. Esta vez la parada de descanso la hacemos en el poblado La Isabel, con unos 3.000 habitantes. La Isabel tiene una bonita estación de tren abandonada. Existen líneas de tren en desuso ya que la producción de caña de azúcar en la que se transportaba ha disminuido drásticamente.
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| Panorámica desde Puente Bacunayagua |
Seguimos nuestra ruta por largas rectas hasta conectar nuevamente con la autopista A1. De Matanzas a Cienfuegos hay unos 170 km. A la altura de Aguada de Pasajeros, cambio de carretera a la CS.
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| Matanzas |
Para conocer Cienfuegos es recomendable pasear por las calles y su Paseo del Prado, que es el eje principal de la ciudad. Se ve a la gente agolpada en las puertas de los supermercados, farmacias, tiendas de recarga de tarjetas telefónicas. El cubano se pasa una cantidad ingente de horas esperando. Esperando por todo. Edificios vacíos con una mesa a modo de recepción y gente deambulando o parada. Prosiguiendo con nuestro paseo podemos ver que casi todas las casas son iguales por dentro, austeras. Unas pocas sillas, una tele, la bici o la moto en el salón. El Muelle de la Patana o el pequeño malecón son los mejores lugares para ver la caída del sol. Se nota la humedad por el calor pegajoso. Eso si, todas las ciudades tienen mugre pero no se encuentra basura por el suelo.
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| Cienfuegos |
Cienfuegos es el paraíso de las motos checoslovacas marca Jawa y de las alemanas MZ. No obstante, se ven por toda Cuba. En cuanto a coches, el ruso Lada es uno de los coches más vistos por toda la isla.
Recomendaciones para ver: casi todo concentrado en el Parque José Martí con su Plaza Central, la catedral de la Purísima Concepción, el palacio de gobierno y el Teatro Terry o cruzando la bahía en ferry el Castillo de Jagua, una fortaleza del siglo XVIII. Cascadas de El Nicho en la Sierra del Escambray; playa de Rancho Luna o la reserva de flamencos en Laguna Guanaroca.
Punto negativo, al caer la tarde, salen muchos mosquitos hambrientos en busca de presas fáciles.
214 km
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| Trinidad |
DIA 5 - Etapa 4: CIENFUEGOS - TRINIDAD
Lo primero, aprovechar las infraestructuras de las grandes ciudades y antes de comenzar la etapa, llenar el depósito de gasolina. De momento, no estamos teniendo problemas con la escasez de suministro que nos habían advertido.
Circulando por la isla cubana nos damos cuenta que está prohibida la publicidad. Tan solo se pueden ver carteles en las carreteras cubanas exaltando la Revolución con distintos eslóganes que se repiten a lo largo y ancho de la isla.
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| Trinidad |
Efectuamos la salida para Trinidad por la carretera CS hasta el paso del río Caunacao que se convierte en la 12, todo seguido hasta la costa. Así hasta Camilo Cienfuegos para bordear por la carretera costera el Gran Parque Natural Topes Collantes, por su parte sur. Una vez superado el parque y pasado por la playa La Boca, en la desembocadura del Río Guaurabo, enseguida se llega a la Trinidad. Otra ciudad Patrimonio de la Humanidad desde 1988 por la UNESCO. Trinidad es casi una ciudad museo de aspecto colonial y colorido. Fundada por Diego Velazquez en 1514.
Sobretodo el centro histórico con sus calles adoquinadas, la Plaza Mayor y la Torre Manaca-Iznaga. Espectacular torre vigía que se usaba para controlar a los esclavos africanos que trabajaban en las explotaciones azucareras. Se nota que estamos más al sur ya que la temperatura es más alta, así como el cambio de vegetación. Llama la atención, que siendo tan turístico sea una tarea muy complicada encontrar un bar para tomarse una cerveza o algo fresco.
Recomendaciones para ver: Casa de la Trova, Canchánchara (con su receta propia de cócktail a base de ron, lima y miel) y la Bodeguita del Medio o Museo de Arquitectura Colonial, Museo Romántico.
En las afueras: El Valle de los Ingenios, Parque Natural El Cubano y Salto del Caburní (ambos en Topes de Collantes). Se ofertan muchas excursiones a caballo y visitar el Mirador del Valle.
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| Mar Caribe |
96 km
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| Varadero |
DIA 6 - Etapa 5: TRINIDAD - VARADERO
Salida con destino a Varadero, una de las playas más famosas del mundo. Es la etapa reina en kilometraje de este viaje. En el trayecto, tenemos la posibilidad de pasar por Santa Clara para conocer la historia del Che. Pero es la opción más entretenida y llegaríamos muy tarde a nuestro destino. Optamos, por tanto, por el camino más corto, que es regresar a Cienfuegos y deshacer el camino hacia el cruce de Coliseo para tomar la carretera 101. Paramos en un gasolinera de la autopista y repostamos las motos y bebemos unos típicos refrescos norteamericanos pero de procedencia mexicana. En Cuba no hay criterio con los extranjeros. Unas veces quieren cobrar en dinero en efectivo y otras que pagues con tarjeta de crédito.
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| Río Caña |
Poco después, cambiamos de continente y viajamos hasta Australia, a tan solo 170 km de Trinidad. En la Autopista Nacional A1, hay que tomar el desvío a la altura de Jagüey Grande y a 1 km. llegamos a la localidad de Australia. Fue el primer pueblo cubano en dejar de usar mano de obra de esclavos en las plantaciones de azúcar.
Recomendaciones en Santa Clara, en caso de tomar la otra ruta alternativa: Mausoleo del Che, Tren Blindado, Plaza Central, Casa Dupont, Parque Josone o Marina Internacional.
281 km
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| Varadero |
Día de relax en el hotel disfrutando de la pensión completa. Día de descanso de las motos. Nos dedicamos a la playa y las cosas buenas que te da la vida en sitios como este. Hoy toca sufrir las discrecionales faltas de suministro por escasez: no hay leche. Ahora tampoco hay bayetas de limpieza. Otros días, nos comentan los lugareños, faltan otros alimentos que se van alternando.
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| Varadero |
Al caer la tarde, otra lucha con los feroces mosquitos.
0 km
DIA 8 - Etapa 6: VARADERO - LA HABANA
Ultima etapa de este viaje. Deshacemos Punta Hicacos por la Autopista Sur, unos 18 km al paso por los manglares. A la salida de Varadero, un peaje de 20 pesos cubanos por moto. Ha sido el único peaje que hemos encontrado en todo el viaje. Volvemos por la Vía Blanca de la costa norte cubana. Se divisan refinerías y se puede mascar el sabor del petróleo en el ambiente. Casi parecido cuando adelantas a un coche (carro) o camión por las carreteras isleñas. En Cuba parece que conocen poco el tema de las emisiones de gases, los catalizadores y los filtros. Se mastica la combustión y la mezcla aceite con carburante en el denso ambiente.
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| Matanzas |
Otra cuestión a lo largo de estos días y km, no hemos visto policía en las carreteras y apenas hay accidentes. Si se pueden ver puntos de control, técnico y alcohol en las carreteras, a la salida o entrada de poblaciones. Por ello, es conveniente reducir la velocidad. Las matrículas con letra K (extranjeros) como nuestras motos no suelen ser objeto de inspección.
Aquél que pase un rato más en Matanzas puede visitar las Cuevas de Bellamar.
En La Habana, hay dos sitios por los que está prohibido circular en moto. La 5ª avenida, reservada a coches oficiales y diplomáticos. Tan solo se puede atravesar viniendo de otras calles perpendiculares. El otro punto prohibido es el túnel de la Vía Monumental que accede a la ciudad desde Varadero. En la Vía Monumental, rebasado el Estadio Panamericano está el Antiguo Peaje del Túnel, donde nos obligan a darnos la vuelta y callejear buscando la alternativa (más larga pero más segura) por Vía Blanca, o tomar la Nacional. La otra opción es un omnibus, donde cargar las motos y cuando se llene, salir. Lo mismo son 15 minutos que 4 horas de espera. Ante esa incertidumbre, nosotros nos buscamos la vida bordeando al sur por Vía Blanca.
Llegamos, por fin, al barrio de Vedado, considerado el más residencial. Tras los trámites de devolución de scooter, tomamos un taxi que nos lleva frente al Capitolio. Ahí comienza la aventura a pié por la capital de Cuba. Comemos en La Habana Vieja y hacemos un primer recorrido andando por el Paseo del Prado hasta el Castillo de San Salvador de la Punta, donde comienza el Malecón con sus 6 km de longitud. Paseamos cansinamente hasta la noche cerca del Hotel Nacional.
La primera impresión que nos da la ciudad es que es menos de lo que se espera y de lo que es en realidad.
183 km
TOTAL Km de viaje: 1.229
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| La Habana |
DIA 9: LA HABANA
Los hoteles en La Habana son bastantes caros, por tanto es mejor alojarse en casas particulares. Ya por la mañana, cuesta encontrar un sitio para desayunar, la leche sigue racionada y escasea. Hoy conseguimos que nos pongan leche medida con cucharilla en el café y gracias a que encontramos un hotel abierto. Los negocios abren, normalmente, desde las 09:00 a las 17:00 horas, en horario comercial.
La capital cubana (fundada por Diego Velazquez en 1519) y declarada en 1982 Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, cuenta con más de 2 millones de habitantes. La ciudad podría ser el escenario de una película de guerra donde abundan las casas destruidas, es un panorama desolador.
Al no disponer de las motos, toca ejercitarse caminando. La primera visita es a la Plaza de la Revolución. Una de las más grandes del mundo. Alberga el monumento a José Martí, una gran torre con forma de estrella y un mirador. También, en la plaza se localizan distintos ministerios e instituciones de importancia. En la parte trasera de la plaza está el Palacio Presidencial.
No muy lejos de allí está la Necrópolis Cristóbal Colón. Este cementerio declarado monumento nacional en 1987 tiene mucha fama local pero no es tan grande. Al contrario que en Argentina, entierran los ataúdes y no los dejan en la superficie de los panteones. Para llegar al centro histórico decidimos tomar un “Almendrón”. Ya en La Habana Vieja, comenzamos desde la Plaza de San Francisco de Asís y recorrer a pie la calle O’Reilly, Plaza de Armas, Castillo de la Real Fuerza, Catedral de la Virgen María de la Concepción Inmaculada y su plaza.
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| La Bodeguita del Medio |
Y a poca distancia está “El Floridita”, que funciona desde el año 1817. Hemingway, otra vez su más afamado cliente tiene dentro una estatua en su honor. Pero por El Floridita también pasaron Gary Cooper, Marlene Dietrich, Ava Gadner, Spencer Tracy y otros muchos. Hemingway popularizó ambos locales con su frase: "Mi mojito en La Bodeguita, mi daiquirí en El Floridita”. En los dos bares ofrecen música típica cubana en directo.
El escritor Hemingway vivió en el hotel cercano “Ambos mundos” de la calle Obispo. Víctor Hugo también vivió en la calle O’Reilly, no muy lejos de allí.
Comprobamos de nuevo que hay colas para todo, hoy era el día de venta cerveza. Largas colas en las calles rodean los comercios y tiendas. Los cubanos se pasan la vida esperando. Advertimos que los mercados dan un aspecto penoso, carentes de productos. Los pocos artículos que hay son servidos con cartilla de racionamiento. Es curioso ver, en las calles, a los perros identificados con su tarjeta de identidad colgada al cuello.
Hoy queremos probar a comer en un paladar. Supongo que habrá de todo, pero ha sido muy normalito. Recomendación de restaurantes: “5 sentidos”, en La Habana Vieja. “Ideas”, en Vedado.
Centro Habana es el barrio, en la parte norte, que une la Habana Vieja y Vedado. También de aspecto decadente. No lejos de allí se encuentra la Fábrica de Tabacos Partagás.
Para aquellos que quieran hacer una salida nocturna: “La Zorra y el Cuervo” o “El Gato Tuerto”. Jazz y música en directo. Ambos muy cerca del Hotel Nacional.
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| La Habana |
DIA 10: LA HABANA
Seguimos conociendo la ciudad de la Habana a pie y en taxi. Esta vez para cambiar de ambiente, nos dirigimos al barrio de Miramar. Ideal para ir en taxi el cruce de la 5ª avenida con la calle 70. Un poco más abajo del cruce mencionado, junto al mar, podemos encontrar unos chiringuitos modernos, a pie de playa que no es playa, muy a pesar de las sombrillas. Al final de la 5ª, tenemos un parque de atracciones, el Coco. Para ir hemos ido en un taxi Büick del '57 y al regreso en un Chevrolet del '47. Siempre hay que regatear antes de subir y negociar el precio.
En esta zona de Miramar es donde concentran las embajadas de la mayoría de los países. Excepto la de España, situada donde comienza el Malecón, junto al Parque 13 de Marzo o la de Estados Unidos. Llama la atención el inmenso bloque de hormigón de la embajada de Rusia.
Vamos regresando hasta la Fuente de las Américas y luego al barrio de Vedado. Los días son calurosos y ya que apetece un helado nos vamos hasta la famosa heladería “Coppelia”. Chasco, dice el vigilante que hay que reservar con 24 horas. Increíble.
La alternativa es ir al Hotel Nacional y disfrutar de sus jardines pero, segundo chasco. Está bloqueado por la Cumbre de Bolivarianos. Alternativa, comer por la zona. Tercer chasco, el restaurante “Roof Top Laurent”, con terraza y bonitas vistas también está cerrado. Por tanto, habrá que desquitarse con una buena hamburguesa en “El Biky”.
Descanso por la tarde y para cenar una pizza pequeña y bebida (2) menos de 400 cup. En la entrada de los sitios públicos no hay gel hidroalcohólico, tan solo lejía diluida guardada en botellas de agua mineral envueltas con cinta de embalar.
Recomendaciones para ver en la capital habanera: Bosque de la Habana, Avenida del Puerto, Parque Central, Parque Militar Morro-Cabaña, El Cristo, los Almacenes San José Finca Vigía.
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| Capitolio Nacional - La Habana |
DIA 11: LA HABANA - MADRID
El último día lo dedicamos, como todos los anteriores a buscar un sitio para desayunar. Es el reto diario para comenzar como si de una carrera de obstáculos se tratara. Si el día anterior habíamos encontrado leche no hay garantía de que la haya al día siguiente en el mismo lugar. O que falle la máquina del café o vete tú a saber. Todo son excusas o impedimentos para que nada funcione correctamente. Una vez superado el paseo matutino en busca del “café con leche perdido”, nos dirigimos a pie (unos 40 minutos, aproximadamente) hasta el Museo del Ron Havana Club (entrada 240 cup). La entrada básica, que da derecho a la visita guiada, cóctel de bienvenida (especie de mojito) y cata final de ron 7 años. Es interesante ver proceso de cómo se hace el ron, parecido al whisky
Hemos comprobado a lo largo del viaje que la fruta no tiene color y es insulsa e insípida. Otras curiosidades es que en La Habana no hay mosquitos, así como que es habitual que roben el papel higiénico y las fregonas de los restaurantes.
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| Sloppy Joe's Bar |
Muy cerca el Capitolio Nacional de Cuba. Construido en 1929. Es un metro más grande que el de Washington (construido en 1800). En el interior del edificio se encuentra el Diamante del Capitolio, que marca el km 0 de las carreteras cubanas.
Hemos comido y agotado el tiempo de vacaciones, por lo que un transfer privado (por la empresa que nos ha alquilado las motos) nos conduce al Aeropuerto José Martí.
A la entrada de este pequeño aeropuerto, medición de la temperatura. Obtención de código QR de vacunación. Al no tener conexión a internet, casualmente, hay unas chicas amables que por “la voluntad” o propina, te gestionan el dichoso código. Facturación, control de pasaportes - donde se quedan con la Visa- y el posterior control de seguridad.
Pasamos la noche en el cielo cruzando el océano. Aprovechando la rotación de la tierra, lo hacemos en 8 horas 20 minutos y llegamos al día siguiente. Son las 10:00 de la mañana. Tenemos tiempo de descansar y comenzar la aclimatación a la diferencia horaria (jet lag).
Conclusión:
Cuba es un país en una isla. Un país venido a menos al que está pasando una alta factura el vivir en constante “revolución”. Donde se adoctrina en las escuelas a los niños. Lleno de eslóganes revolucionarios que creen que mitigan la pobreza. Es triste ver que la prosperidad de un país de lo que pudo haber sido y en la miseria en que se ha convertido.
Se justifican en el cierre por el COVID, la falta de turistas por la pandemia, pero las heridas de guerra son de hace muchos años. La realidad no miente. Está sobredimensionado.
Ante todo, una experiencia, siempre positiva, en una moto no convencional, partiendo de la base que no es una moto. Hay que incidir que los viajes en moto siempre aportan más posibilidades para conocer los países en aspectos que no suelen ofrecer las agencias de viaje. No obstante, en esta pequeña aventura no se llega a conocer del todo Cuba pero sirve para hacerse una idea bastante completa.
Para ver el video resumen del viaje, pincha el link:
